Tras una pancarta en la que se leía ‘Indignados y Hartos’ el Sindicato de Periodistas de Andalucía en Granada se sumó ayer a la manifestación que recorrió la capital con motivo de la conmemoración del Día de los trabajadores, una celebración internacional que en España, en estos momentos, tiene más sentido que nunca para un colectivo profesional que asiste al goteo continuo de empleos destruidos desde hace casi cinco años y que en los dos últimos ha dejado diezmadas las redacciones.

El derecho de la ciudadanía a recibir una información veraz, honesta, plural y contrastada como principio fundamental, se lesiona continuamente al eliminar a los profesionales encargados de elaborarla y difundirla a través de unos medios de comunicación que difícilmente pueden ofertar una información de calidad cuando en sus redacciones el número de sus profesionales desciende a velocidad constante.

Mañana día 3 de mayo, Día de la Libertad de Expresión, es una fecha señalada para un colectivo profesional que en este momento centra su especial preocupación en la sangría de trabajadores despedidos desde 2010 -más de 20.000, según algunas fuentes- que amenaza la supervivencia de muchos medios y lleva irremediablemente al empeoramiento de las condiciones laborales de aquellos que aún conservan su puesto de trabajo. La libertad de expresión peligra cuando prima la imperiosa necesidad de conservar la actividad que proporciona el sustento diario.

El SPA y la FeSP piden al Ejecutivo que ponga en marcha políticas activas para la creación de empleo, con especial incidencia en los jóvenes. También debe aprobar medidas que ayuden a sobrevivir a los medios de comunicación, sin distinguir entre los grandes grupos y las empresas pequeñas, porque son imprescindibles en una sociedad democrática.