• Estos sindicatos lamentan la postura engañosa de CCOO y sus falsas informaciones

Los representantes de UGT, FESP y el Grupo de Trabajadores de Barcelona en el Comité Intercentros de la Agencia Efe lamentan las continuas y conscientes mentiras vertidas contra estas secciones sindicales por CCOO durante el proceso negociador con la dirección de Efe del incremento salarial de 2016, que ha concluido esta semana con un acuerdo, pendiente de aprobación por parte de Sepi, para subir el sueldo a la plantilla un 1%, que se aplicará retroactivamente desde 1 de octubre de 2016.

Según estos sindicatos, es falso que existiera un Plan B realista y viable por parte de CCOO. Con su postura han hecho el caldo gordo a la Dirección de Efe y a la Sepi, que negaban inicialmente cualquier tipo de mejora salarial para la plantilla de la agencia. Solo tras 6 meses de negociaciones la mayoría del Comité ha logrado una mejora en las nóminas después de 10 años.

En estos últimos meses, CCOO ha tratado de presentarse de forma engañosa ante la plantilla como el único sindicato que ha defendido una subida del 1% para 2016. Evidentemente, todo el Comité Intercentros defendió desde un primer momento recibir el máximo de incremento salarial permitido para este año, como es de sentido común. Estas secciones sindicales recuerdan a la plantilla que para 2017 se ha solicitado un aumento del 3% y se preguntan si CCOO tratará nuevamente de simular que es una petición exclusiva de dicha sección sindical.

La reclamación unitaria del 1% para 2016 aplicable desde el 1 de enero del año pasado topó con el veto de SEPI, accionista y “dueño” de Efe, que argumentaba que una empresa con un ERE en vigor no podía beneficiarse de ese aumento salarial desde principios del año, sino una vez acabado el ERE. A partir de ahí se preguntó al abogado del comité, José Alejos, si, dado el veto de SEPI al incremento del 1% desde el 1 de enero de 2016, la vía judicial de manera colectiva tenía posibilidades, y tanto él como los presidentes de la mesa negociadora lo desaconsejaron, porque el Estado autoriza un aumento de “hasta un 1%” a las empresas públicas, con lo que el porcentaje concreto del incremento queda a discreción de SEPI.

Es cierto que un incremento del 1% con efectos desde el 1 de octubre de 2016 es un aumento modesto teniendo en cuenta la pérdida de poder adquisitivo sufrida en los últimos años por la plantilla, pero estas secciones sindicales consideran que era mejor obtener este incremento consolidado en lugar de perderlo con propuestas inalcanzables y pelear ya por una nueva subida para este año.

Convenio abierto

Por otra parte, estas secciones quieren dejar claro que, al contrario de lo que dice CCOO, la negociación del convenio sigue abierta con asuntos sobre la mesa como la actualización del reparto de los días de vacaciones, medidas que favorezcan la conciliación, y la igualdad. Además, ahora será el momento de batallar para que los ingresos extraordinarios que aportará
el SIEG sirvan para mejorar las condiciones económicas de los empleados de Efe y para conseguir nuevas contrataciones, dado que el ERE ha hecho que la plantilla de Efe adscrita al convenio se reduzca desde cerca de 950 a poco más de 700 personas

El acuerdo firmado con la empresa también pone de manifiesto que este pacto afecta únicamente al incremento salarial de 2016, de forma que sigue viva la reclamación judicial por la paga extra de Navidad de 2012. Es necesario subrayar que el aumento salarial del 1% a partir del 1 de octubre se aplicará al salario base, a la antigüedad y a todos los complementos. En este sentido, cabría preguntar a CCOO por qué razón no estaba de acuerdo en que pluses como la jornada partida, la rotatoria o conceptos como el fin de semana, por mencionar algunos, puedan subir un 1%, cuando llevan congelados desde el año 2009, sino solo en aplicar la subida salarial al salario base y la antigüedad.

El acuerdo pactado establece que solo se beneficiarán de la subida salarial los trabajadores afectados por el Convenio, de manera que deja fuera de ese incremento a directores y delegados, y CCOO tendrá que explicar por qué no defendía este punto.

También resulta poco coherente que CCOO se apropie en sus comunicados de argumentos o propuestas que otras secciones sindicales llevan a las reuniones, tratando de aparecer como “salva patrias” o que tenga la desfachatez de proponer que las negociaciones se aplazaran a septiembre en un intento continuo de retrasar y obstaculizar cualquier tipo de acuerdo.

UGT, FeSP/SPA y el Grupo de Trabajadores de Barcelona confía en que la cordura manifestada por ciertos miembros de CCOO se imponga sobre la estrategia delirante impuesta por algunos de sus líderes, y esa sección termine por abandonar la deriva de conflicto sistemático que solo sirve a sus propios intereses propagandísticos y olvida los del resto de los trabajadores de
Efe. Pruebas de esa estrategia de conflicto que ha perjudicado al conjunto de la plantilla son el bloqueo del Consejo de Redacción, inoperativo desde hace años por un plante de esa sección, así como el fracaso de la negociación de la devolución de la paga de Navidad de 2012 por el empecinamiento de CCOO, que impidió que todos los trabajadores pudieran recuperar una parte de su salario.