Ante las noticias de que la Televisión Autonómica de Murcia podría ver reducido su presupuesto en hasta el 80%, la preocupación ha surgido entre sus empleados que estiman que unos 220 puestos directos y más de 300 indirectos pueden perderse.

El comité de empresa de la Televisión Autonómica Regional ‘7RM’ de Murcia entiende que esto es a causa de “una ineficiente gestión económica que ha dejado de lado el verdadero significado de servicio público, que, se suponía, iba a tener este medio de comunicación”.

El manifiesto emitido por el comité de empresa de GTM, afirma, entre otras cosas:
“De confirmarse el gran recorte planteado podrían perderse cerca de 500 empleos entre directos e indirectos. Se trata de una decisión unilateral del Gobierno Regional, con la ausencia de otros partidos políticos, sin diálogo previo con los agentes sociales y los sindicatos; una situación sin precedentes en la que no ha existido ningún tipo de negociación previa entre las partes implicadas.

Los trabajadores de GTM entendemos la situación de crisis por la cual está pasando la Comunidad Autónoma de Murcia, estamos dispuestos a cooperar para que la gestión del dinero público en la televisión autonómica sea lo más efectiva posible, pero nuestra colaboración no puede pasar en ningún caso por la pérdida de nuestros puestos de trabajo.

Somos de aquí, trabajamos aquí, vivimos aquí y queremos seguir haciéndolo, contribuyendo al progreso de nuestra Región, haciendo Murcia, no destruyéndola. Estamos hablando del posible cierre de la mayor empresa audiovisual de nuestro entorno, la única salida profesional para cientos de estudiantes que todos los años salen de nuestras universidades e institutos con el sueño de encontrar un trabajo digno y en su tierra.

El cierre de nuestra empresa es un mensaje en forma de misil hacia la industria audiovisual murciana, un mensaje que dice: No hay futuro, lo había, pero a nuestros dirigentes se les ha ocurrido arrancarlo de cuajo. (…)

Seguimos pensando que es posible hacer una televisión cercana, austera y de auténtico servicio público, modificando actuaciones y procedimientos que permitan hacer más con menos, manteniendo los puestos de trabajo. Nosotros no somos, como muchos piensan en la calle, funcionarios con trabajo para toda la vida, una panda enchufados e hijos de papá, no tenemos el carné de un determinado partido político, no cobramos sueldos desorbitados por salir en la tele pero sobre todo, no somos responsables de cómo se ha gestionado el dinero público en esta televisión.

En todo caso hemos sido el instrumento a través del cual unos y otros, Administración y GTM, han obtenido beneficios en todos los ámbitos, también propagandísticos y económicos. Pero no somos los culpables del despilfarro del que se habla en los medios y entre la opinión pública. El Comité de Empresa se ha reunido en dos ocasiones en los últimos meses con responsables del Gobierno Regional y se ha pedido siempre el respeto de los puestos de trabajo y también se ha abordado el tema de la gestión del dinero, con pelos y señales. Desde la Administración siempre se ha insistido en que el proyecto era viable y que no tendría por qué haber repercusiones en la plantilla. Pero semanas después aprueban una ley en la que anuncian un recorte de hasta un 80% que supone, prácticamente, el fin de la actividad. (…)

Los trabajadores de GTM/La 7 nos sentimos indefensos y desamparados ante la incomprensión de cierto sector de la opinión pública, arengados por algunos partidos políticos que nos están obviando en un gesto incomprensiblemente insolidario, atentando directamente contra el más elemental de los derechos laborales: el trabajo.

Por eso requerimos el apoyo de sindicatos, gobierno, partidos y organizaciones a los que sí importen de verdad los trabajadores. Repetimos que no estamos hablando de números, sino de personas y familias de nuestra Región en los cuales nadie está pensando. Esperamos poder seguir trabajando aquí, en esta televisión, por mucho tiempo, porque es de lo que vivimos, nosotros y nuestras familias.

Y queremos seguir desarrollando nuestro trabajo con mayor libertad, porque mensajes como éste también deben tener cabida en un medio de comunicación del siglo XXI, en el que la diversidad de opiniones y expresiones, basadas en el respeto, nunca deben ser censuradas ni manipuladas intencionadamente.

Vamos a luchar por nuestros puestos de trabajo, no nos importa la fórmula que haya que utilizar para mantenerlos. Lucharemos con todas nuestras fuerzas, todos nuestros medios, y toda nuestra vitalidad, que es mucha.

Fuente: FeSP