El comité de empresa convoca paros los días 10 y 28 de mayo, tras haber perdido un 46% de poder adquisitivo en los últimos 15 años.
Los trabajadores del diario Córdoba irán a la huelga los días 10 y 28 de este mes, como protesta por el grave deterioro que vienen sufriendo en sus condiciones laborales: sobrecarga de trabajo, pérdida de complementos y una disminución de su poder adquisitivo del 46% desde 2008, tras haber sufrido congelación de sueldo y sucesivas rebajas salariales del 10% en 2012 y del 6% en 2018.
El comité de empresa, integrado por el Sindicato de Periodistas de Andalucía y Comisiones Obreras, ha tomado esta decisión tras consultar a la asamblea de trabajadores. Desde octubre del pasado año el comité ha mantenido varias reuniones con la gerencia que han resultado infructuosas (la empresa se niega a subir mas de un 2%). El último intento negociador por parte de la representación laboral de los trabajadores fue una citación el pasado 1 de marzo en el SERCLA (Sistema Extrajudicial de resolución de Conflictos) a la que la empresa no se presentó.
El esfuerzo titánico de la plantilla
El comité viene denunciando que la empresa “no ha tenido ni siquiera un gesto de agradecimiento por el esfuerzo titánico que ha estado haciendo la plantilla durante los últimos 15 años, esfuerzo que en muchos casos se ha traducido en despidos traumáticos, un coste personal e individual para con nuestras familias y un deterioro alarmante de las condiciones de trabajo y a nivel mental/emocional”. “Todo ello unido a una sobrecarga de trabajo provocada por la disminución de plantilla, hay gente a la que le deben 20, 30 y hasta 60 días de descanso”, afirma el comité de empresa en un comunicado difundido a la plantilla explicando las razones de la huelga.
15 años de despidos y recortes
Los primeros despidos colectivos que sufrió la plantilla del Córdoba fueron en 2009, con un ERE a nivel nacional del Grupo Z, su propietario: 10 compañer@s de Onda Mezquita y Diario Córdoba. En 2012 la empresa pidió un nuevo esfuerzo a la plantilla: una rebaja salarial del 10% y la congelación del plus de antigüedad con la promesa de que no habría despidos. “La empresa se ahorró 270.000 euros, que sirvieron a los pocos meses para sufragar a cinco nuevos despidos”, señala el comité.
En 2018 la empresa volvió a plantear un nuevo recorte y un órdago: o se aceptaba una rebaja salarial del 6% con renuncia a la recuperación del 10 anterior o se descolgaban del convenio y harían una bajada salarial del 30%. En 2020, con motivo de la pandemia, la plantilla fue sometida a un ERTE cuyas condiciones la empresa incumplió en cuanto a horarios y volumen de trabajo, según denuncia la representación sindical.
La empresa no acude al SERCLA
El comité intentó negociar un nuevo convenio con Prensa Ibérica, la nueva propietaria, que compró el grupo en abril de 2019. “Pero la empresa nos ha estado mareando una vez más, faltandonos al respeto e intentando presionar al comité”, señalan. En enero esta actitud de los nuevos propietarios fue denunciada en el SERCLA, que citó a la empresa el 1 de marzo pero la empresa no compareció. El comité, por mandato de la asamblea de trabajador@s, ha convocado huelga para los días 10 y 28 de mayo, día de las elecciones municipales.