– La periodista rusa lleva dos años exiliada en España y ha participado en Granada en el ciclo “Literatura, Periodismo y Exilio”
“El Periodismo es una herramienta para mostrar los problemas de los países, y para investigar en los crímenes, en los que a nadie le gusta profundizar”, piensa la periodista rusa Tatiana Ulianova, que ha intervenido en el ciclo “Literatura, Periodismo y Exilio”, que se desarrolla en la biblioteca provincial de Granada. El acto estuvo presentado por el secretario general del Sindicato de Periodistas de Andalucía, Francisco Terrón. En el ciclo participan también el nicaragüense Octavio Enríquez, la mexicana Lidya Cacho y la venezolana Carina Sainz Borgo.
Ulianova llegó a España exiliada en 2022, después de ser amenazada y despedida de su trabajo en la cadena NTV tras haber publicado en las redes sociales sus opiniones contrarias a la guerra de Ucrania. Con anterioridad había trabajado en una cadena local y había pasado por Rusia Today.
Ucrania y Gaza
“Elegir entre el Periodismo y la vida -responde a las preguntas del público asistente a su conferencia- es un dilema difícil”, señala, y reconoce su admiración por el trabajo que realizan muchos colegas en los conflictos, “a pesar de que a muchos les está costando la vida”.
Ulianova ve paralelismo en la invasión de Ucrania y el genocidio de Gaza, con el asesinato de periodistas y la prohibición de entrada a la prensa extranjera, “se silencia la verdad, se fomenta la desinformación, y con ello se oculta el sufrimiento de la gente”.
La periodista rusa, que ya cubrió el conflicto entre Ucrania y los independentistas rusos del Donbás, afirma que en la guerra de Ucrania no hay fuentes fiables y que ambas partes practican la desinformación y la propaganda: “muchas veces las actitudes que se ven en la guerra no son fruto de la maldad intrínseca de las personas, sino de la información manipulada que reciben”.
Información basura y bulos
La periodista rusa cree que el mayor enemigo del Periodismo y de la democracia son la falta de transparencia, los bulos y la desinfomación. “No podemos construir una sociedad aceptable -dice- basada en el rumor, la información basura y los bulos”. Por ello cree que debe haber transparencia en la propiedad y la financiación de los medios, “sería muy interesante en mi país conocer el ecosistema que alimenta los periódicos afectos al régimen mediante publicidad del Kremlin o de empresas próximas al gobierno. Eso ayudaría a tener una información veraz e independiente”. Por eso le parece una buena medida el Reglamento Europeo sobre Libertad de los Medios de Comunicación.